Impresiona ver en estos días la histórica pérgola de la Plaza de España, junto a la Iglesia del Patrón San Miguel, en Tazacorte, sin la habitual cubierta de la trepadora flor de la Buganvilla. Los operarios municipales de Jardines, cual peluqueros con licencia, han aprovechado el parón social provocado por la pandemia del coronavirus para pasar la podadora tanto a la trepadora como al también histórico Laurel de Indias que se encuentra junto a esta pérgola.
No son muchas las generaciones que suelen ver una imagen tan peculiar como la que presenta actualmente este monumento turístico de la localidad. Vean la comparativa desde el mismo punto, antes y después de la poda:
La pérgola fue construida en 1933 siendo alcalde Jose Pérez Lorenzo. Sus mosaicos fueron importados desde Sevilla. Ha sido siempre el punto de encuentro de residentes y visitantes; una foto ineludible cuando se pasea por el casco urbano de Tazacorte. En estos días solitaria, sin vecinos que cuenten cuentos bajo su extinta sombra, permanece a la espera de recuperar su esplendor entre hojas verdes y flores rosas y blancas.
La llamativa estampa impacta más aún cuando se compara desde el otro punto de vista, con el mar de fondo, en el conjunto podado de pérgola y Laurel:
